domingo, 15 de mayo de 2011

triste destino niños argentinos Andrea Homene Psicoanalista asa1

MORIR A LOS 17

 

Lic. Andrea Homene

Psicoanalista

Perito Psicóloga

Defensoría General Morón

 

Baradero.   Otro chico muerto por la policía.  Su negativa a detenerse con su ciclomotor “justificó” el disparo por la espalda que le causó el deceso.

Hace un par de semanas,  dos menores fueron muertos, también por la policía, en José León Suarez, por un efectivo que “confundió” el cargador de su arma, y le colocó balas de plomo en lugar de proyectiles de goma.

Al igual que estos chicos, Jonathan también fue abatido por la policía “en un enfrentamiento”, aunque luego la autopsia reveló que presentaba tres orificios de bala con entrada por su espalda.

Jonathan no fue noticia en los periódicos.  Como no lo son muchos de los jóvenes que aparecen muertos en los pasillos de los barrios carenciados.

Tal vez, quienes reclaman “mano dura”, incremento en el monto de las penas, baja en la edad de imputabilidad, no adviertan que con un aparato policial y un sistema penitenciario plagado de excesos en el ejercicio del control y del poder (recordar las imágenes de los tormentos a los que era sometido un interno en la cárcel de Mendoza, difundidas recientemente), el efecto de tales medidas se traduce en actos de represión que no sólo no contribuyen a la “rehabilitación” de quienes presentan conductas delictivas, sino que además, constituyen una violación a los derechos fundamentales de cualquier ser humano.

O peor aún, quizás lo adviertan, y en su fuero íntimo sientan que “se hace justicia” cada vez que un chico cae muerto a manos de la policía.

Creo que es interesante recordar que, como he manifestado en otra oportunidad, el discurso del otro social que ubica a  los jóvenes como demonios a combatir, también produce “daños colaterales”, como lo ha sido el asesinato de Matías Berardi, a quien los testigos de su persecución creyeron delincuente, y lo dejaron atrapar y matar por sus secuestradores.

Los hijos de quienes marchan pidiendo mayor accionar policial y represión, están expuestos a la misma policía que mató a Lucas en Baradero o a los dos pibes de José León Suarez, o a Jonathan.

De todos modos, la condición de ser humilde y morocho hace que haya un sector de la población adolescente con mayores probabilidades de ser víctimas de los excesos en la represión. O de la discriminación, como el “salteño”, brillante estudiante del colegio Carlos Pellegrini, a quien nunca dejaban entrar a las fiestas de egresados en los boliches de la capital, aún cuando exhibía su carnet de alumno del “Pelle”, por ser “negro”.  Hasta llegaban a decirle que se fuera porque lo iban a denunciar por haberle robado el carnet a algún otro chico.

Jonathan es un caso testigo del fracaso de las instituciones: desnutrición en su infancia con la consecuencia de déficil intelectual; abandono temprano de la escolaridad, sin que se hayan tomado medidas desde la escuela para que el chico retomara los estudios luego de dejar de asistir a clases a los 8 años; consumo de drogas y la imposibilidad de su madre de lograr que su hijo fuera internado en algún centro de rehabilitación del sistema público; alojamiento durante un año en un “centro de recepción” de régimen cerrado; muerte en la calle con tres impactos de bala en su espalda, en un “enfrentamiento” con la policía.  Todo en 16 años.

Cuando entrevisto a muchos de estos jóvenes en conflicto con la ley, resalta un factor, que aún en su reiteración, no deja de resultar impactante: la expectativa de vida que tienen para ellos mismos rara vez supera los 25 años. Me pregunto entonces qué ha pasado con ellos, cómo ha sido su vida hasta ese momento (ninguno supera los 17 años), para que su existencia  transcurra en una inmediatez que resulta dramática: carecen de la posibilidad de proyectarse en un futuro que contemple alguna ilusión; están habituados a la muerte de sus pares, de modo tal que no los inquieta demasiado la posibilidad de morirse o de ser muertos por la policía; han padecido en su mayoría la pérdida de familiares cercanos (padres o hermanos) de manera trágica y temprana.  Atravesados por el discurso capitalista, anhelan “tener para ser”, del mismo modo que muchos otros jóvenes, con la diferencia que ellos no cuentan con la posibilidad de pensar que algo de aquello que quieren pueda ser alcanzado a mediano o largo plazo, siendo muchas veces esta imposibilidad lo que dispara conductas delictivas que acortan la distancia entre lo anhelado y su obtención. Se reitera la frase “quería las zapatillas buenas y no me las iba a poder comprar nunca”.

La impotencia los lleva al acto.

La castración inaugura el campo del deseo. “Eso que falta” constituye el motor que impulsa la búsqueda de ese encuentro siempre fallido, pero que a la vez justamente por eso es incesante. 

Pero para que esta operación castración, fundante del sujeto en tanto barrado, y deseante, se lleve a cabo más o menos eficazmente, es condición previa la existencia de un Otro que aloje y haga objeto de su propio deseo a ese sujeto “en constitución”.  Cuando el Otro se ve imposibilitado de constituir como objeto de su deseo a ese niño, el proceso de libidinización se ve seriamente afectado. Y un niño escasamente libidinizado dispondrá de escasa libido para poder sostenerse en el aprendizaje y en la actividad cotidiana.

La falla en la función materna es detectada en muchos de los casos de menores en conflicto con la ley.  El equívoco frecuente es suponer que la instancia paterna normativizante es la que ha intervenido fallidamente. Y este equívoco promueve “soluciones” tendientes a instalar o reforzar dicha función, favoreciendo un deslizamiento hacia lo punitivo que en escasa medida modifica la posición del sujeto.

En el abordaje de los jóvenes en conflicto con la ley, se pone en evidencia que algunos movimientos en la posición subjetiva son posibles en la medida en que el joven encuentra un Otro capaz de alojarlo en el campo del deseo, reduciendo la exposición al goce del Otro, lo que promueve la asunción de la responsabilidad subjetiva.

El recurso del castigo o la punición acentúa por el contrario, dicha exposición al goce, reforzando un circuito de goces en los que tanto el sujeto como el otro son tratados como objetos para la satisfacción pulsional no mediatizada por el deseo.

La escena de los tormentos a los que fue sometido el interno de la cárcel de Mendoza, genera un horror  y una angustia que denuncian la presencia del goce por fuera de la ley.

Si el tratamiento que se aplica a quien ha transgredido la ley, consiste en la exhibición de un poder que humilla al sujeto, objetalizándolo, y mostrándole cómo resulta posible gozar al otro impunemente, no será extraño que al salir en libertad dicho sujeto reincida en conductas transgresoras  aún más crueles que aquellas que motivaron su detención.

 

Abuelo sordo Himno Nacional Argentino con señas

Soy bastante sordo, por eso Patricia Sosa decidió ayudarme. Ahora yo tengo que

aprender el idioma de señas .  

Tatu argentino en 1° de Mayo cubano Che médico Africa

 

 

De: Gino Straforini [mailto:mir_rrii@uolsinectis.com.ar]
Enviado el: Domingo, 15 de Mayo de 2011
Para: YO SI PUEDO

 

PROPUESTA TATU

 

 

CIENCIA MAS CONCIENCIA 

 

 

UN AMOR QUE QUEMA Y UN                            

 

SUEÑO REBELDE.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Hemos tenido la alegría y el honor de compartir este 1° de Mayo con el pueblo

 

y la revolución cubana.

 

Somos una pequeña y nueva organización del pueblo, que hemos comprendido que 

 

nuestra militacia no es solo

 

cumplir con los objetivos que nos planteamos, sino vivir en coherencia con las propias 

 

ideas y transmitir con

 

el ejemplo de vida, la voluntad y el convencimiento que la condición humana puede 

 

ser mejorada

 

Que otra

forma de vivir, de pensar, de actuar en la vida es posible y, no solo es

 

 posible, debemos hacer lo necesario, lo

 

que la historia y nuestra conciencia nos determine para humanizar la vida en la tierra. 

 

 

Dra. Valeria Aguirre

 

 

Médica, egresada ELAM - CUBA

 

 

Nacida en Santiago del Estero

 

iniciadora de Propuesta Tatu en

 

Argentina.

 

 

 

 

Nuestra representante, junto a

 

su hijo en este 1° de Mayo en

 

la Plaza de la Revolución.

 

 

 

 Ha participado en las Misiones de Florencio

 

Varela, Barrio Argentino, Lugano, Che Pibe, La Cava. Pihuen,

 

Burzaco, Longchamps.

 

 

Hoy esta terminando su especialidad : Gineco Obstetricia en

 

el hospital Lucio Melendez de Adrogue.

 

 

Representante de P. Tatu en este 1° de Mayo

 

 

 

 

 

Matias Capo, estudiante Universidad Nacional

 

de Lanus, miembro de P. Tatu, responsable

 

político en Misión Vallegrande

 

 

 

Tanto Valeria como Matias, participaron en reuniones y debates con los jóvenes miembros de

 

Propuesta Tatu, estudiantes de medicina en Cuba, en las ciudades de Santa Clara, La Habana

 

y Camaguey. Intercambiaron información y opiniones sobre la realidad cubana y la coyuntura

 

argentina, como así la construcción y desarrollo de P. Tatu en nuestro país, festejando el

 

inicio de nuestra nueva Misión en Salta. Se entrego y discutió un material que será base del

 

III Encuentro de Jóvenes por la Vida Digna en Julio de este año en Bs. As.

 

 

Los jóvenes de P. Tatu en Cuba, reiteraron su compromiso de retorno al país, hacer su especia-

 

lidad en Argentina y su compromiso moral con los más humildes en el proyecto de desarrollo

 

de Propuesta Tatu.

 

Pudimos ver la tarea que se desarrolla en Cuba, Boletines, Talleres, programas de Radio,

 

Prensa. Los jóvenes Tatu, marcharon este 1° de Mayo en La Habana y Santa Clara, con

 

carteles y banderas de Propuesta Tatu.

 

 

 

 

Miembros de Tatu en Universidad de Medicina de Santa Clara - CUBA.

 

 

En la convicción de nuestro compromiso con los invisibilizados, aquellos que cruzan el mundo

 

a hurtadillas, en la osadía de existir como contrabandistas de la vida que pronto dejarán de

 

ser sombras y serán artífices de su destino.

 

 

Con la misma convicción de que la vida no es digna de ser vivida sino cuando la ennoblece un

 

ideal. La vida vale por el uso que de ella hacemos, por las obras que realizamos , eso nos da

 

la dignificación de nuestro yo.

 

 

En la alegría de vivir en un perpetuo amanecer compartimos la dignidad del pueblo cubano, esa

 

que lucha cada día, esa que conquista cada amanecer y jamás mendiga.

 

PROPUESTA  TATU  P.T. - 3

 

POR UNA VIDA DIGNA PARA TODOS